Conseguir limpieza, orden y disciplina en cualquier organización
empresarial es un reto extremadamente fuerte, puesto que involucra, en muchos casos, la adquisición de nuevos
hábitos y la adopción de
medidas que revolucionan totalmente la forma en que se llevan a cabo los procesos técnicos y metodológicos por
parte del personal.
Para obtener buenos resultados, sin caer en la apatía o el abandono
de las prácticas que se están adquiriendo, es muy importante contar con una guía confiable que contribuya al
fomento y
consolidación de políticas de probada eficacia en diferentes países. A continuación, compartimos con usted
cinco pautas que le serán de enorme provecho dentro de su organización para favorecer el aumento de la
disciplina, el orden y la
limpieza entre sus operarios.
* Deshágase de todo objeto inservible: Ubique
cualquier material o herramienta que sea inútil y deséchelo de inmediato. Quedará sorprendido
de la cantidad de basura y artilugios que generalmente ocupan su lugar de trabajo y el de sus trabajadores, e
impiden laborar con eficacia.
* Haga
partícipe a todo el personal, incluyéndose, en las tareas de limpieza dentro de su establecimiento: Cuando
todos los operarios
participan de la limpieza, comienzan a valorar más profundamente las condiciones de asepsia en sus áreas de
trabajo. Además, ello nos permite ubicar desperfectos en las máquinas y equipo que utilizamos, lo que a la
larga representa un mejor
aprovechamiento de nuestros recursos.
* Asigne
un lugar específico e invariable para cada objeto dentro de su área de trabajo: Contar con un espacio para
cada cosa permite
realizar las actividades con más rapidez, pues podemos ubicar cada utensilio con presteza y exactitud.
Recuerde el adagio âun lugar para cada cosa, y cada cosa en su lugarâ.
* Mantenga buenos hábitos entre sus trabajadores:
Cuando se ha alcanzado un nivel de orden y limpieza adecuado, es primordial mantenerlo.
Es importante que sus trabajadores se acostumbren al orden mediante políticas tendientes a recompensar a los
empleados que dan seguimiento a las medidas adoptadas y que además denuncian cualquier falla o desperfecto en
las áreas y equipos
de trabajo.
* Predique con el ejemplo: Una buena táctica para
mejorar en los aspectos que aquí se anotan, consiste en aplicar las
nuevas políticas en los espacios de trabajo de los directivos. De esa manera, se tendrá autoridad moral para
aplicar cualquier innovación entre nuestros recursos humanos.