Uno de los pasos más importantes para un negocio y que más incomoda a
muchos emprendedores es dar el paso de aumentar el precio de sus servicios. Con frecuencia, existen ideas
limitantes que frenan
la subida de precios. Por ejemplo, el miedo a perder clientes, la idea de que dado el contexto de crisis es un
momento poco idóneo para hacerlo, temor a la competencia⦠Sin embargo, mejorar el precio de tus servicios
también implica dar
valor a tu trabajo y tener una mejor calidad de vida.
En ocasiones, existen personas que tienen jornadas de trabajo
interminables y aún así, ganan un sueldo muy modesto. En ese caso, valora tu tiempo y tu esfuerzo optando por
fijar precios que sean
acordes a la calidad de los servicios que ofreces y al tiempo que dedicas a tu trabajo.
Busca otra forma de diferenciarte
El precio dice mucho sobre una empresa puesto que es uno de los
elementos que más influyen en una marca personal. El primer paso para subir tus precios es asumir los riesgos
que puedes correr. Por
ejemplo, asume que puede que pierdas clientes, sin embargo, ganarás más dinero por cada trabajo que
realices.
Ofrece un valor añadido a tus productos o servicios porque es una
forma de diferenciarte de la competencia y de justificar tu subida de precios. Existe un momento especialmente
propicio para subir el
precio de los servicios, por ejemplo, a principios de año o en el mes de septiembre cuando comienza un nuevo
ciclo.
Una buena comunicación
Comunica con tiempo suficiente a tus clientes
habituales cuáles son tus nuevas tarifas y desglosa en el correo electrónico los servicios que ofreces porque
es importante tener
una buena comunicación para transmitir a tus clientes el valor que puedes ofrecer. Valora los precios de la
competencia y busca el término medio para no ser el profesional más caro pero tampoco, el más barato.
Fuente: empresariados.com/